Los nombres de David Gordon Green y Jason Blum se han convertido en sinónimos de revivir los clásicos del terror, y ahora han unido fuerzas para resucitar una de las películas más icónicas de todos los tiempos: “El Exorcista”. Su nueva secuela, titulada “The Exorcist: Believer”, promete mantener a los espectadores al borde de sus asientos y les lleva de vuelta al oscuro mundo de posesiones demoníacas.
Al igual que hicieron con sus exitosas entradas en la franquicia “Halloween”, Green y Blum han optado por una continuación directa del original, ignorando todas las secuelas anteriores. “The Exorcist: Believer” cuenta la aterradora historia de dos adolescentes de un tranquilo pueblo, interpretados por Lidya Jewett y Olivia Marcum, que desaparecen durante tres días después de realizar una sesión de espiritismo en el bosque.
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Cuando finalmente reaparecen, están poseídas por el diablo, lo que lleva al padre viudo de una de ellas, interpretado por Leslie Odom Jr., a buscar ayuda de un exorcista con experiencia en este tipo de situaciones: Chris McNeil, interpretado por Ellen Burstyn, quien retoma su icónico papel de la película original de 1973.
El productor Jason Blum explicó su enfoque para “Believer” y cómo aspira a capturar la esencia del clásico original. “Creo que lo que fue tan inquietante sobre la película de 1973 es lo real que se sentía”, dijo Blum. “Las películas de terror hasta ese momento… parecían más allá. Y creo que la razón por la que esa película resonó tanto es que simplemente se sentía como si fuera un documental, como si realmente estuviera sucediendo”.
Sin embargo, “El Exorcista” ha estado plagada de rumores de una maldición que rodea a la película desde su producción original en 1973. Una serie de incidentes inquietantes, como accidentes en el set, un incendio misterioso y hasta un asesinato, han llevado a algunos a creer que la película estaba maldita.
Para la nueva secuela, “The Exorcist: Believer”, Green y Blum tomaron medidas adicionales para protegerse de esta infame maldición. La filmación sufrió retrasos debido a un incendio que destruyó todos los sets en la casa McNeil, excepto la habitación de la adolescente poseída Regan, interpretada por Linda Blair. Tanto Burstyn como Blair sufrieron lesiones durante la producción. También se informó de varios incidentes y tragedias en el set, lo que aumentó la creencia en la maldición.
En un esfuerzo por evitar que la negatividad y la superstición afectaran la producción de la película, Green y Blum se rodearon de consultores espirituales de diversas religiones y fomentaron una comunicación abierta y honesta entre el equipo. Green enfatizó la importancia de construir una comunidad de confianza dentro del equipo para abordar los temas oscuros y espirituales de la película.
Con “The Exorcist: Believer”, David Gordon Green y Jason Blum están listos para llevar a los espectadores a un nuevo viaje a lo desconocido, mientras mantienen viva la leyenda de “El Exorcista” y esperan superar cualquier maldición que pueda estar acechando en las sombras. La película promete ser una experiencia escalofriante que evocará el espíritu inquietante y realista de la película original que cautivó a audiencias en todo el mundo hace casi 50 años.