Cómo está hoy Gisela Barreto, la sex symbol que tuvo un cambio místico

En la década de los 90, muchas mujeres mostraban su espléndida figura en la televisión, conseguían una popularidad enorme y eran tapa de las revistas, aún antes de que la pantalla se llenara de programas del espectáculo. Una de ellas era Gisela Barreto, quien en los últimos 15 años abandonó el alto perfil y se encomendó a la religión.

La rubia comenzó a llamar la atención como secretaria de Gerardo Sofovich en el popular programa La Noche del Domingo. De allí dio el salto a las tablas e incluso con alguna participación en cine, pero en 2010 realizó un viaje que le cambiaría la vida y la alejaría de los medios de comunicación.

Gisela Barreto marcha provida.jpg

Gisela Barreto en una marcha provida hace unos años.

Gisela Barreto visitó Bosnia, un viaje que había estado en su mente durante muchos años, y allí sintió por primera vez la presencia de la virgen María. Fue en ese momento en el que la modelo y actriz decidió que su futuro era el camino de la fe, la oración y la difusión del catolicismo.

Ícono de belleza en la década del 90

Gisela Barreto nació en Corrientes, el 24 de junio de 1967 en provincia de Corrientes. Pese a recibir una educación muy religiosa de parte de su madre, de chica jamás logró conectar con la fe y eligió una vida muy diferente: se mudó a Buenos Aires para ser modelo, llegó a la TV y se convirtió en una de las mujeres más deseadas de Argentina.

Gisela Barreto selfie.jpg

La rubia protagonizó varias obras teatrales como vedette y actriz, y hasta tuvo una participación en la película La herencia del Tío Pepe, junto a Rodolfo Ranni, Miguel del Sel, Ana Acosta, Marcelo Mazzarello, entre otros reconocidos actores.

En 1996, en medio de su pico de fama, Gisela Barreto se casó con Juan Gabriel Altavista, hijo del actor que interpreto a “Minguito”, luego de dos años de noviazgo. Si bien compartían profesión y vivieron años felices, la pareja se terminó separando y hoy mantienen una buena relación.

Un viaje que le atravesó el alma

Devota de la Virgen de Medjugorje, patrona de un pequeño pueblo de Bosnia, la mamá de Gisela Barreto le habló siempre de la necesidad de viajar hacia ese país. Y su hija le hizo caso cuando ya tenía 43 años, su madre había fallecido y ella estaba dejando su carrera como modelo.

Gisela Barreto Bosnia.jpg

La foto de Gisela Barreto en 2010 con una monja de la que es devota.

La foto de Gisela Barreto en 2010 con una monja de la que es devota.

Fue en 2010, en el aniversario número once de la muerte de su mamá, que la vedette decidió cumplir con el deseo de su madre. Había ido de viaje a España, pero dejó Madrid y se tomó un avión para ir hasta Bosnia y sentir en carne propia una presencia celestial que le atravesó el cuerpo y el alma. Desde ese día, todo cambió.

Tras orar en la iglesia, Gisela Barreto sintió una enorme paz que la llevó a aferrarse a una fuerte convicción: debía impulsar una transformación espiritual interna, dejar atrás las costumbres que había adoptado del mundo artístico y encomendar el resto de su vida a la religión y la fe. Y así lo hizo.

La nueva espiritual de Gisela Barreto

Al regresar al país, Gisela Barreto entendió que la vida que llevaba no era compatible con la espiritualidad que estaba decidida a seguir. Acostumbrada a mostrar su cuerpo en la TV y en las tapas de las revistas, la modelo dejó su carrera, se alejó de los medios y estudió locución en el Instituto Superior de Enseñanza Radiofónica para compartir mejor la palabra del Señor.

Gisela Barreto iglesia.jpg

Además de dejar de mostrar el cuerpo a la vista de Dios, Gisela Barreto también decidió dejar de lado la vida en pareja, nunca más se puso de novia y aseguró en una nota que sus únicas parejas eran la iglesia y Jesús. Cada día, la rubia se encarga de rezar el rosario, ir a misa y ampliar sus conocimientos sobre el catolicismo.

Instalada en Corrientes y alejada de los medios, Gisela Barreto fue noticia en los últimos años por sus polémicos dichos sobre el aborto, las infancias trans, el coronavirus y una confusión en una entrevista que hacía un canal de cable sobre los cárteles de la droga, que creyó eran carteles de la vía pública.

Polémicas, furcios y “purificación” con el coronavirus

De todas esas polémicas, una de las que mayores críticas le generó fue su opinión sobre el coronavirus. En abril de 2020, cuando hacía pocos días la Argentina vivía en cuarentena, con la gente encerrada en sus casas, Gisela Barreto hizo un polémico video en el que dijo que el Covid-19 está “purificando” al mundo y lo vinculó con la religión.

La ahora conductora se manifestó en su cuenta de Twitter y un video que filmó en su casa y que subió a su canal de YouTube, titulado “Presidente cuidemos la salud ante que la economía pf!”, la correntina le suplicó a Alberto Fernández para que no se flexibilice la cuarentena y la gente cumpliera con el aislamiento y el uso del barbijo en todos lados.

“¡La única forma de parar esta plaga es regresando de corazón a Dios! ¡La vida sin Dios es vacía, fría, árida, estéril! El pecado es extremo: Aborto, eutanasia, degeneración, corrupción, manipulación de la ciencia, perversión en el clero. El mundo gira al revés y el Señor está purificando”, aseguró Gisela Barreto en Twitter.

Cómo está hoy Gisela Barreto, la sex symbol que tuvo un cambio místico